Marihuanol, pomada de marihuana...

Extraño título, solo es el nombre de una pomada para los dolores musculares que esta supuestamente hecha con extracto de marihuana y mentol, la verdad es vaselina con mentol y alcanfor pero los hierberos les ponen mariguanol, y es buenísimo para los calambres conocido por los renales de la privada porque la gente de los pueblos la llevan para sus familiares y hasta la gente de la ciudad les compra para poderse poner cuando los calambres atacan. Mil veces vi aplicarla, y hasta hace un par de días, me la pusieron a mí porque motivo no aguante y por no llorar deje que me echarán en el menjurje ese...la verdad me recuerda a la persona que lo llevo por primera vez a la hemodiálisis es una señora de complexión delgada, pelo largo, muy amable, era de un pueblo que la insuficiencia había atacado con saña y alevosía, que casi no hablaba con ella porque yo llego a dormir a la hemodiálisis, por eso de mi ansiedad, eso sino dejaba observar que a veces me veía y me decía que bonita estaba, que envidiaba mi fuerza mi voluntad de estar así, ir a trabajar, arreglarme y el hecho que iba tres veces a la hemodiálisis, pese a que es doloroso me dejaba hacer más desorden, yo no le podía decir a nada, porque y que le decía no conocía sus posibilidades económicas, ni tampoco iba alardear de estar bien o no hacer desorden porque eso sería mentirme a mí misma, tampoco le podía dar ánimos y decirle todo va estar bien, pero si le podía dar una sonrisa . Pese a la adversidad siempre me sonreía la niña julita, en realidad ella me recordaba a mi abuela paterna una mujer pese a su delgadez, y tez morena sumamente elegante y seria, doña julita a veces no iba a la hemodiálisis porque en el pueblo en San Rafael todos se conocían, y varios eran renales y por las tardes iban a las atoladas, o a las fiestas o a los velorios, es decir, hoy había otra razón que los unía ser familia renal, más de un par de veces compartí hemodiálisis con ella, lo único que yo siempre dormía sigo durmiendo y ella me decía que hasta eso me envidiaba porque era más fácil pasar el tiempo así, en los brazos de Morfeo. Hasta recuerdo el día que me invito a desayunar, yo quería un pan francés solo y ella dijo que ella lo iba a pagar, me dio pena, pues porque por no tener vuelto no me lo cobraron, pero, supongo que es parte de ver a alguien que va sola a su tratamiento y que sea joven, los días que llegaba mal con la mirada triste y una sonrisa me decía que tal, q estaba jodida pero había ido a una fiesta y que había disfrutado porque la vida es solo una. Durante el tratamiento a ella siempre le llegaba la horas de los calambres se hacían presente y no quería o no debía dejarle que le pasaran agua porque si no estaría hinchada, y la hemodiálisis tendría que ser antes de los ocho días que la tenía programada no porque quisiera sino por necesidad, un día llevo a una nieta, la cual quizás nunca había visto a alguien joven en hemodiálisis y llego a sobarle con el famoso ungüento mariguanol, pero la veía a la abuelita con los calambres sin poderse parar, tratando de luchar para vencerlos y no moverse tanto del dolor porque si no la fistula podía atravesarla con las agujas, pero estaba impactada la joven viéndome.. y yo no me molesto a veces me apeno, aunque para ellos es como mostrar alguien que puede estar bien pese a ser renal, pero a mi preocupaban los calambres de la niña julita, así que lo que hice fue decirle como sobarla para que se le calmaran. La siguiente semana doña Julita estuvo ingresada por una gripe mal cuidada, que se le hizo neumonía, luego se mejoró y llego a la hemodiálisis con el pelo recién lavado saliendo del hospital pero estaba triste y molesta del pecho, como decía ella, al igual que muchos de mis compañeros de tratamiento no le gustaba quedar cerca de mí por el frio, se embozo de pie a cabeza, pero ya estaba decayendo sobre todo el hecho de estar en el hospital la apagaba, era como capturar una estrella… que se iba apagando Hace unos días me llamaron de la hemodiálisis que querían que llegara más temprano para poder salir más temprano las enfermeras, me extraño pues yo tengo horario de salida del trabajo para esas mis actividades, pero no deje decírselo a la sra, y me dijo es que se murió doña Julita y quiero ir a presentar mis respeto a la familia y ud sabe que es hasta san Rafael obrajuelos queda lejos. Me lleno de tristeza y a mi mente solo pueden venir imágenes de ella, y me duele saber que partió, aunque ella decía que yo tan joven ella por fin ya había vivido, pero para mí era parte de la familia renal, en donde algunos son tíos, sobrinos, papas, madres, pero todos tenemos un papel, y como en las familias a veces no hablamos mucho, así me pasa a mí. solo sé que le puedo decir Hasta Luego, espero ya esté mejor, y que ya no sienta el dolor en el pecho, que le causaba la impotencia para respirar, que la gripe no la va hacer sufrir, que su lucha y su papel hasta el final fue importante y valido, pero no nos podemos rehusar a la disposición del creador, que pueda caminar debajo de la lluvia, y ya no ir a la hemodiálisis porque ya en el cielo estamos sanos, en compañía de todos aquellos que partieron este año. Un abrazo de mi alma a su espíritu doña julita, descanse ud que puede y gracias por demostrarme que no existen limitantes más que la uno quiere, que uno debe hacer lo que uno quiere, lo que uno desea porque si se termina la vida con que me quedo, con nada...y que es en vida que uno debe disfrutar, además de introducir el marihuanol a la unidad como el producto natural que no cura el cáncer, ni la IRC pero si quita los calambres. No la olvidare y cada vez que nos pongan marihuanol, la recordaremos con una sonrisa…usted fue fuerte!! Hasta al último momento no perdió la intención de luchar, aunque a veces ya el boleto esta pagado y no tiene regreso y es vuelo sin escalas.