Sin azúcar sin sal…solo con sabor renal


Este uno de los días más largos de mi vida, el motivo la zozobra, las mil y una agujas que traspasaron mi piel pues temen que sea diabética, debían practicarme el examen de tolerancia de la glucosa, de cuatro horas, seis punciones, en ayuna, y solo en mi cuerpo un liquido con sabor a fruit ponch pero con dos libras de azúcar, mi preocupación es notoria, no es el hecho de las agujas es decir, si duelen, no conozco a la persona que me extraerá la sangre pero tampoco sé si el resultado saldrá bien.
Toda esta historia inicia a causa que he empezado aumentar de peso, la doctora que es una persona muy profesional y que me estima, me ha estado regañando y tiene razón a veces uno hecha en saco roto los consejos profesionales o de alguien con más experiencia, durante una semana todos los días me ha dolido la cabeza mucho, más de lo normal dirían es hipertensión pero oh sorpresa no lo es, así que decidí visitarla en la clínica a mi nefróloga, ella me regaño de entrada pero debía escudriñar en mi niñez, en mis gustos alimenticios, es más me dijo ponte de pie que debo revisar que tanto has engordado, así lo hizo y nuevamente apareció el regaño, si es cierto me puso como triste, porque a nadie le gusta estar pasadito de peso, sobre todo si eso va afectar mi condición, fue cuando ella inicio con la explicación, diciéndome que iba a ser diabética, si continuaba así, y cuál es el problema diría cualquier persona normal si de todos modos ya no tiene riñones, claro yo se la diferencia, en primer lugar hablamos de la posibilidad que se me complique mi situación, que me vuelva insulino-dependiente, que en caso de herida o de cirugía, corra peligro de poca sanación, además está el hecho desmesurado que puedo perder la vista, en fin, las complicaciones son muchas, que el envase este pasado de tamaño no están relevante, aunado a la preocupación el hecho que mi familia materna y paterna hay diabéticos.
Cuando me indico el examen que en un inicio era de dos horas pero cambio a cuatro, cuando le relate que en mis exámenes no hace mucho me apareció glucosa en la orina, no era precisamente porque soy una persona dulce, sino porque había un problema ya renal a esas alturas, e inician las cuatro horas más largas de mi vida.
El lunes fui a la hemodiálisis como cualquier día, por la noche, lo único que cansada no me he sentido muy bien, razones la desconozco, creo que es pretender rendir el cien por ciento cuando mi capacidad es de 50 a 60 por ciento, pero uno debe ser valiente y afrontar sus responsabilidades, salí tarde pero a la hora de pesarme en la bascula sale una enfermera con afán que un paciente quería hablar conmigo de la fundación, en ese momento por mi mente paso bueno ha de quererse unir al esfuerzo la veré otro día, pero como que alguien me dio un golpe supongo que fue mi ángel de la guarda y me llevo a preguntarle a la enfermera si ella tenía un problema legal, solo asome la mirada a la puerta de vidrio y vi sus ojos vidriosos por las lagrimas que me decían que si, así que me quede esperando a que saliera de la unidad para poderla escuchar.
el clima estaba frio, la noche era corta para descansar, pues el día siguiente eran las cinco de la mañana la hora para iniciar mi vida cotidiana, me levante, y esta vez si mi dosis de café mañanero que es una tazita pequeña que tengo, sino que era en ayunas, a bañarme con agua fría, ya estaba lista para mi día, de comprobar si soy o no diabética, que es lo que pienso al respecto pues me preocupa, ya estoy tomando medidas, reduciendo el consumo de azúcar, de carbohidratos, que además me servirán para bajar de peso, a estas altura ya vivo sin sal, bueno si hay pero es mínima en cantidad casi impercibibles, pero sin azúcar llevo ya una semana sin ella no me ha ido tan mal he bajado a penas un kilo en una semana
llego el día y la hora del examen de las cuatro horas, eran las seis y media de la madrugada y el laboratorio cerrado, estaba cerca de un lugar de esos que entretienen a caballeros, me llamo la atención un carro que estaba cerca era una señora que vendía pupusas, el salvadoreño ingenioso y la elaboración de carros, oh sorpresa el laboratorio no abre tan temprano tuvimos que esperar la ansiedad corría por mis venas, a las siete de la mañana abrieron y pase a una silla descubrí mi brazo derecho pues a él le tocaba el trabajo que le extrajeran la sangre la primera aguja como toda duele, de hecho me hizo hematoma, es decir, se me hizo morete, tómese esto y me da un bote helado, no sabía tan mal hace quince años me dieron uno que era de aspecto gelatinoso, aceitoso, y uno escapaba a vomitar hoy venia con sabor a ponche de frutas, en serio que si como dulce, lo empiezo a ingerir y me doy cuenta que sabia refresco y supuse bueno se trata de un fresco que se le había pasado la mano a la señora que lo elaboro, me preocupe porque pensé a pues si soy diabética pues no lo sentí tan asqueroso de entrada, a la media hora otra toma de sangre, me dolía el estomago, el asco venia a mi cuerpo, el nerviosismo me hacía temblar, ya eran las ocho debía esperar una hora para otra vez me tomaran como dirían los españoles una analítica, y aquí en el Salvador me sacaran sangre, a uno se le viene pensamiento negativos, bueno pensé a esa hora si soy diabética a pues ahora hago otra fundación y vamos con todos también con los diabéticos que están abandonados, debo revelar que a veces quisiera ayudar a muchas causas pero la verdad no se puede y como me repiten debo enfocarme.
Me percate que no estaba sola y pensé en que la persona que me acompañaba tenía hambre y no tenia culpa que yo estuviera ahí, así que le sugerí que desayunara, fuimos al McDonald y mi mente revoloteaba, y mis lombrices (hablo de parásitos, si es que lo tengo) pedían a grito comida, por un momento pensé y si ya no voy, y mejor llego otro día y pensé en que debía ir a la hemodiálisis otra vez pues no podían andar el elixir de glucosa por todo el cuerpo, y que la doctora llegaría a verme cuando estuviera en la máquina de hemodiálisis y me despertaría de forma precipitada y me regañaría, así que ordene la comida y vi comer nada mas, valiente pita!!! Me decia
Por lo que mientras leía el periódico, en realidad veía las paginas, y las imágenes a quien no le pasa que ve nada mas las fotografías, a menos que estés en hemodiálisis HD y quieres que pase el tiempo lees los clasificados y entre ellos los edictos que nadie lee, aunque el notario se afane por publicarlos, bueno no se me había ocurrido bien ponemos un negocio de usted quiere saber si ha sido heredero o lo llaman en algún juzgado por causa pendiente, entonces, la gente llegaría a un lugar en donde laboraría renales porque formáramos una base de datos desde la hemodiálisis y brindaríamos esa información, bueno ya lo hice constar, esta es mi idea de negocio, no se vale robar , ya lo patenticé.
Pues regreso a mi calvario, esta vez ya era la hora y teníamos que ir a tomar la otra muestra en el laboratorio no me podía quedar, era pequeño, no había ni televisión ni periódico y mis piernas iban y venían como es que dicen el síndrome de piernas inquietas, en fin, esta vez me saco la sangre la que estaba en recepción pensé que con ella me iba a doler mas, era mal encardad la señora, yo sonreí porque ese es mi método para que os me traten bien, tal vez funciona, como vampira lista para ver mi sangre pensó en mi otro brazo yo le dije soy renal y olvide mi brazo izquierdo no existe, así que empezó a saborear mis venitas delgadas, yo la vi y le dije esa no me duele, mejor por aquí, así que procedió y me inserto la aguja para que vean que uno se deja llevar por la primera impresión resulta que ni me dolió o estaba dormida por la glucosa, no lo sé, bueno gracias le dije hay regreso en una hora, así que me fui a un centro comercial a ver locales cerrados y el único era el lugar con la ropa de mujer más hermosa de mi color favorito, que aunque fuera millonaria no compraría ahí mejor compro lo que está de moda en versión chafa, chabela, imitación, porque cuando uno es renal y hermoso cualquier cosa le queda bien, puedo reír de esto, son lujos innecesarios, y no son votos de pobreza lo que pasa que yo pienso me compro unos zapatos o una falda de lujo pero le quito a cambio dinero que debí a ver dado a mi madre para los gastos de casa, o después necesitare pagar cosas, uno no debe pretender ser quien no es y yo soy pita, y punto sin lujos, con poco me siento bien y no es conformismo es realismos.
Ya había pasado la hora y debía ir de nuevo al laboratorio, esta vez le tocaba a la misma de la primera vez, ya no quería ver donde me iba a puncionar, así que cerré los ojos cuando vuelvo a ver me estaba chupando la sangre, es broma, parte del relato, pero si vi un chorro de sangre no se que había puncionado pero la heparina estaba vigente y ella se asusto mucho, le vi la cara de espanto pues la sangre brotaba como que si era un chorro de agua, así que le pedí el algodón y como todo sabemos procedimiento de apretarnos el acceso pues hice lo mismo( esto en lenguaje de no renal seria que debía apretar con mis pulgares el orificio hasta que la sangre deje de salir) me levante y le dije bueno regreso en una hora
Esta vez era una hora en la juguetería, una nueva, aun huela a polvo, hay un cerdo de peluche que me encanta, nunca he dejado de amar los juguetes revise pasillo por pasillo y juguete por juguete y presionando botones para que hiciera ruidos, ni sentí el tiempo, pero se acercaba la hora me dolía la cabeza, el estomago me rugía y me sentía mal hasta la presión sentía alta, de regreso al laboratorio ya era la última, me tomaron el examen y le pregunte cuando estarán los resultados, me dijo a la cinco, pero a esa hora no quería ya estar cerca de ningún lugar medico.
Y a comer, bueno no vayan a creer que a comerme una crepa, con chocolate, o una hamburguesa, pesen a que era mi oportunidad de comerme lo que me hace falta un sushi, os pregunto no tengo derecho, pues me respondo si pero no, mejor algo ligth, sentí que era el mejor sándwich de pollo hervido el mas delicioso probado, y luego a la hemodiálisis, estaba preocupada la doctora muy pendiente preguntaba cómo me sentía, yo solo le contestaba mire que me gusta su bolsita, (que es un bolso que ella carga de un muñequito me gusta y siempre que la veo se lo pido, mas de broma que cierto, pero si funciona en horabuena) y después le decía como me sentía, a bueno vas a la hemodiálisis si te sentís mal me avisas.
El día siguiente a recoger los exámenes con un temblor en todo el cuerpo, con asco, con miedo, tenía cara de perro apaleado, la noche sin azúcar, es mas en mi casa ya no me regalan una cuchara de azúcar, pues como la sal desapareció así empezaría a desaparecer la azúcar, frustrada, pues para mí la azúcar es como para el alcohólico el alcohol, o al fumador el cigarro, pero pensaba ósea que la fundación ya valió, debo poner mi vida no de ejemplo sino de puente para que esta sea grande así que si soy diabética pues ni modo dieta, ejercicio moderado, y medicamento, y animo.
Tomo los exámenes y que sentí, la verdad me remonte a los años en donde iba hacerme el examen de creatinina y que pensaba que las medicinas de los hierberos, chamanes, biólogos, o médicos homeopáticos servirían y me devolverían dos riñones hermosos, bueno Salí corriendo de laboratorio con el sobre, y abrí el sobre adentro del carro con desesperación, con angustia y empecé a leer las cantidades, en ayuna tanto, en media hora ya con el jarabe alto, luego la primera, la segunda, la tercera y cuarta hora, ostia no tengo nada los valores bajo normales, el corazón saltaba de felicidad debo admitir, que pensé bueno hay que celebrar con un chocolate pero de ahí mi rollito de panza me dijo no ni lo sueñes compartí los resultados con mi doctora, ella estaba feliz y me puso en un mensaje estas más que bien, ya eso me subió los ánimos aun mas, y solo me recalco a suturarnos la boca, para ya no engordar
Y vuelvo al mismo punto, uno es dejado, no busca ayuda a tiempo, yo si lo estaba haciendo es más me sirvió para concientizarme que cambiar los hábitos de mi vida me mejoran la misma, que yo soy lo que como, y que ser antojadiza me va cortar la vida, quiero ser feliz, quiero que la gente viva bien, y mi vida un ejemplo no!!! Jamás, el ejemplo son los que no se atienen, no se medican solos, los que admiten que están errados y enmiendan, los renales que luchan y no le guardan rencor a la vida.
Así que desde hace una semana sin azúcar y sin sal solo con sabor renal, y no hablo de sabor a metal, significado de uremia, al contrario, hablo de sabor de VIDA de ganas de luchar, de decirle a la gente aquí estamos vivos con mi mejor amiga la máquina de hemodiálisis, la de diálisis, o el riñón que alguien me dono, todo eso es sabor renal, la sonrisa con la mirada, las tertulias durante el tratamiento.
Mi próxima misión bajar cuatro kilos, y tratar que un joven deje la amargura esa es una enfermedad crónica, o será curable ya veremos, tal vez le caiga una gota de mi sangre dulce en su máquina y se llene de amor por la vida y se enamore de lo que es, de su realidad, y haga algo por eso, no solo lo piense. Así que me sobran historias solo que me falta tiempo..
Por si alguien me lee muchas gracias, es un honor….